25 de abril de 2006

Pollos y Autobiografías

Me intoxiqé. Comí de un buffete cuyo pollo estaba en mal estado. ¿Cómo sé qe el pollo era, de entre todos los platillos, el qe me envenenó? Simple: mientras expelía la mayor cantidad de vómito qe me haya salido de la boca en toda mi vida, claramente distinguía el sabor a pollo. Por eso lo sé.

Hacía mucho qe este blog había dejado de ser autobiográfico. Creí qe sería bonito darle ese toqe íntimo con un episodio como éste.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

=(...pobre guso, vomitar es lo peor, ojala ya te encuentres mejor.

Anónimo dijo...

Después de cada vómito el cuerpo se siente con una energía del 200% :D

Probaste pollo dos veces, Guso. Qué envidia, y lo mejor, terminaste sin estar lleno, ¡ja!