1 de diciembre de 2009

Tazas y Copas

Yo me bebo mi vino tinto en taza. Las copas son tan frágiles y mariconas. No van para nada con lo tosco y desfachatado de los tintos, y sólo le crean fama de refinado y altanero. Las copas no tienen asa ni se pueden agarrar con toda la mano para levantarse y bajarse brúscamente. Las copas son transparentes y hacen que la gente, en vez de beber, malgaste el tiempo viendo la consistencia y el color del vino, como si se lo fueran a untar en vez de tomárselo. Finalmente, el aire de sofistificación mezclado con alternativés que brinda resulta irresistible para las nenas.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

cuando te lo tomes en bolsa y con popote ganaras mi admiración

Javier dijo...

Este post ya lo había leido.

Javier dijo...

Creo...

Alfonso Varela dijo...

@Javier
Confirmo al post como inédito.

@gusomac
y deja tu aparte de eso las prende de hecho es el remedio infalible a la frigidez.

Isela dijo...

Ah,caray... por qué hacen lo mismo en otras partes y no están en el desierto??

Guso dijo...

Creo que ese último comentario de Isela iba en el otro post, ¿no? O sea, en http://gusopuntocom.blogspot.com/2009/12/cervezas-y-tintos.html

miami dijo...

Buena gusi jeje