¿Somos las caricaturas de Dios? Somos caricaturas para qién sea. Hasta para mi. Y podríamos ser caricaturas para ti. Sólo es cosa de qe pongas atención y te fijes en lo ridícula qe es nuestra especie y lo graciosos qe podemos ser.
Puedes llegar a un edificio público y reparar en qe la máqina de refrescos debió haber sido fabricada en 1976. Mientras esperas la luz verde en tu auto, fíjate en las cosas qe han esculpido en el polvo de otros autos, desde reclamaciones de lavado hasta un pene eyuaculando. O podrás notar qe algunos otros autos parecen haber sido armados con piezas de Lego de diferentes cajas. Algunos peqeños comerciantes proyectan sus perversiones en la decoración de sus negocios, probablemente de manera inconciente; mientras otros esperan qe llegue Santa Clouse e igual y les enseñe a escribir su nombre correctamente. Y por supuesto, en las tiendas departamentales hay muñecos de Rebelde. ¿No lo encuentras gracioso?
1 comentario:
Además interesante. Y revelador.
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