Simi Salud y Política

Desde qe volví de Zihuatanejo (por cierto, ya hay fotos) me cargaba con un dolor de garganta insoportable. Pues ahí voy rumbo a mi casa y qe me detengo en una sucursal de Farmacias Similares. Con ronca amabilidad pregunté a la simidependiente qé medicamento tomar. Su recomendación fue ir enseguida al simiconsultorio con el médico. No supe qe esperar. Bueno, de hecho si pensé en algo, pero enseguida lo consideré demasiado surrealista, incluso para mi vida. Qe agradable sorpresa. Salí de ahí con veinte pesos menos, una receta médica y un abrazo. Ya me siento mejor.

Espero no ser malinterpretado. No porqe considere qe la causa de un tipo con pésimo gusto me haya proveído de un buen servicio de salud voy a comenzar a apoyar sus intenciones de gobernar el país. Imagínate: un simipresidente. Deberíamos seguir los pasos de los californianos qe eligieron a Schwarzenegger como gobernador. Tragos coqetos para todos... ¡MASCARITA PARA PRESIDENTE!