6 de septiembre de 2024
Malos y mingitorios
En el kínder había unos niños malos. Así les decíamos: Los Malos. Eran tres o cuatro y no jugaban con el resto del salón en el recreo, sino que se iban a un rincón liderados por un niño que se llamaba Raymundo. Un día fui reclutado para infiltrarme entre Los Malos, pretendiendo que me quería unir a ellos. Al principio del recreo no entendía muy bien por qué eran Los Malos: sólo estaban sentados comiendo sus refrigerios y platicando de las mismas cosas que platicábamos los demás. Luego, Raymundo dijo Vamos a ver la popó y entonces Los Malos se fueron al baño y pasaron el resto del recreo viendo un mingitorio en el que alguien, de algún modo, había cagado.
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1 comentario:
En un contexto cultural, los “malos y mingitorios” representan la intersección de transgresión, marginalidad y espacios públicos íntimos. Son símbolos que exploran lo prohibido, lo vulnerable y la conducta humana fuera de la norma.
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