Con no poco horror encontré en la televisión un grotesco programa donde niños y niñas eran sometidos a un supuesto concurso de talento. Una indefensa pequeñita maquillada como la más vulgar mujerzuela cantaba con ánimos artificiales un tema de Selena. Aquel otro chiquillo de cuando mucho cinco años contaba chistes con dobles y hasta triples sentidos sexuales que seguramente a él le tomará al menos otros diez años comenzar a comprender. ¿Qué clase de padres acomplejados hacen eso con sus hijos? ¿Cómo se atreven a aplaudir a la Selenita cuando es obvio que ella ni siquiera eligió la canción y ni siquiera le provoca emoción alguna la carrera de quien la interpretara? Es obviamente la madre quien siempre quiso ser Selena y que, al haber quedado tan lejos de serlo, proyecta ahora en su hija sus frustradísimos sueños. Y, ¿cuántas horas pasó el otro cándido memorizando su discurso de barrio bajo, restando tiempo a sus juegos y escuelas? Todo para que su padre vea en su hijo al Polo Polo que él no es.
7 comentarios:
Me excita cuando entras en tu faceta de psicólogo.
El televidente que disfruta viendo estos programas tambien es complice.
A mí sí me gusta ver cantar a Magaby.
pobres niños
Ya, tambien lo vi una vez y luego me hizo que me sintiera ligerememte deprimida, y un poco agradecida por mis padres u_u
A mí no me gusta que asumas cosas tan descaradamente.
Pero te amo.
Muy frecuente, padres que proyectan sueños frustrados en sus hijos. Por eso hoy hay tantos niños bailando regueton, por eso hay tantas putitas y malandrines, malos hijos son malos padres.
Publicar un comentario