Tiendas y Patrones

Se ha demostrado que los mexicanos asentados en áreas urbanas presentan patrones muy estables en sus hábitos de visita a las tiendas Oxxo. El fenómeno puede ser utilizado para lograr objetivos con los cuales tales conductas parecieran no tener relación. Por ejemplo, ¿qué tal conseguir el número telefónico de esa chica con la que no te animas a hablar?

Habría que observar a Chica algunos días para trazar su patrón de visitas al Oxxo. A partir de ello, debes apostarte en las ridículas mesitas de las tiendas a comer una sopa instantánea, justo a la hora en que calculas que Chica aparecerá. En dado caso de que termines con la sopa y aquella no aparezca, puedes continuar con unas papitas y, en el último de los casos, con una botella de agua. Cuando finalmente Chica llegue al Oxxo, fórmate detrás de ella y disimuladamente apunta su número cuando se lo diga al cajero para adquirir tiempo aire. Listo.