3 de noviembre de 2009

Hogares y Libertades

Tanto había mirado a tantos vagabundos en las calles sintiendo tanto vacío y pensando que era tanta la lástima y darme cuenta tanto tiempo después que en realidad lo que me provocan es tanta envidia. Es que... ¡míralos! Andan por la ciudad atareados simplemente en el presente, en el instante. Que si les da sueño, tan sencillo como echarse tal y donde están, sin mortificarse por pagar la renta o siquiera por recordar dónde carajo dejaron la piyama. Que ahora tienen hambre... cualquier cosa les sirve para comerse; no que uno, eligiendo entre los menús, preparando la cena y combinándole un vino, cuidándonos de alimentos que pudiesen estar ligeramente sucios y evitando los que no se nos antojan. No deben avisos a nadie, no comparten decisiones, no les cuestionan a dónde van, obviamente no pagan Ecogás y no tienen que estar pensando en frases astutas para poner en Twitter.

7 comentarios:

Cabrón Insensible dijo...

Jaja te la mamaste con lo último.
De hecho más de una vez he pensado que si las cosas van verdaderamente mal, jamás pensaré en el suicidio, pero sí en abandonarme por completo y vivir cínico "como un perro"... estaría bien chingón

Cabrón Insensible dijo...

Jaja te la mamaste con lo último.
De hecho más de una vez he pensado que si las cosas van verdaderamente mal, jamás pensaré en el suicidio, pero sí en abandonarme por completo y vivir cínico "como un perro"... estaría bien chingón

Solera dijo...

Pues aunque suene chistoso, sí hay mucha gente que piensa así.

En más de una ocasión he escuchado compañeritas de mi escuela decir que la gente pobre es pobre porque lo decidió, porque al igual que los inditos (que conocieron cuando fueron a misiones) son muy simples y se conforman con taaaan poco, hasta con un pañuelo que les regalas se la pasan el día jugando o_O

Shellwyz dijo...

Y se vale en escalas, por ejemplo yo fui semihomeless mucho tiempo, y aún no tengo twitter

Azu dijo...

Presumir que eres homeless o cuasi-homeless es lo menos homeless que hay.

cocoliso dijo...

jajaja, no cabe duda que en la diferencia esta lo mas chido de este planeta..no querer pagar impuestos es simplemente no querer pagar la vida de los que pagan impuestos..todo esta en la perspectiva individual, el niño de la calle que pasa hambre y falta de techo, el niño que crece en el campo que sufre de falta de casa limpia y bonita, el niño de ciudad asfixiado por falta de espacio personal... y con esto: lo que cada quien tiene y disfruta...

Anónimo dijo...

¡Jaja! Culero.