El color de la situación se tornó tal, que fue necesario que el personal de seguridad se involucrara. Rociaron con sus aerosoles a los apretujados que se empujaban. Casi ajeno, yo observaba a todos alejarse, tallándose los ojos y cubriéndose las bocas y las narices con las camisas y las playeras. Fue así como descubrí que soy inmune al gas lacrimógeno.
6 comentarios:
Muy mal Gus, tienes una falta de ortografía.
Genial así podrás destruir con calma y sin prisa McDonald's y Seven Elevens cuando vayas a foros económicos internacionales.
Técnicamente fue un error de dedo y no una falta de ortografía. Ya lo corregí. Gracias, Jupiter.
Ya veremos si es cierto lo que dices... te rociaré con fines científicos, !chan chan chaaan! :S
*u* saluitos
Yo soy inmune al gas de las sodas (fuera de pedo). Lo bueno es que a la soda no soy inmune...
¿Estás hablando del Rockampeonato? La cosa se puso pirata, después del gas era para que tumbaran la barra, pero pues es que era el recinto del alcohol y a ese se le respeta.
Publicar un comentario