21 de abril de 2008

Nupcias y Bailes

Párvulos en el jardín de niños. Es lo que me recuerdan los invitados que, ataviados en trajes ellos y vestidos de noche ellas, bailan dirigidos por las estrictas instrucciones de las canciones que tocan en las bodas. "Pie derecho arriba", dice primero. "Haciendo un relajo", sigue luego. "Todos en bolita", continúa. Atentos y obedientes, los bailandos realizan estos y otros ejercicios de psicomotricidad.

Siempre, siempre, siempre, se viene la hora de No Rompas Más (mi pobre corazón). Es en verdad frustrante ver como, a pesar de haberse repetido su ritualista coreografía por más de quince años, son pocos los que no se equivocan. Por Dios.

2 comentarios:

jerónimo dijo...

jajaja pues sí, la secuencia coreográfica de esa canción siempre será un misterio sin resolver para mí (con todo y lo buen bailarín que soy cof cof).

la verdad me encantan las bodas.

Ruben Trinidad dijo...

jaja..y yo sigo sin aprenderla--