25 de julio de 2009

Sabiduría y Tropiezos

Una vez tuve un pájaro en la mano y lo dejé ir por pretender tener a un ciento que pasaba volando. Otra vez, a pesar de que no la bebería, obstruí cierta agua y no la dejé correr. Otra vez, sabiéndome perfectamente maceta, quise sin éxito pasar del corredor. Otra vez pasé varias horas buscándole tres pies al gato, hasta que me quedó claro que tiene cuatro. Otra vez abarqué muchísimo, pero pues casi no apreté. Otra vez me pareció poca cosa un malo al que conocía e insistí en conocer a un bueno. Otra vez esperé hasta que se ahogara un niño para decidirme a tapar un pozo.

Juraría que no soy el primero al que le pasan estas cosas. Desearía que alguien hubiese transmitido su conocimiento al respecto evitando así mis chascos.

5 comentarios:

Cabrón Insensible dijo...

Es que hay cosas que no se aprenden en la escuela, Guso

Carlitos dijo...

no le entendí a la ilustración que acompañó este anti-refranero.

Mtt dijo...

Jajaja.

Shegarito Rivers dijo...

"La vida es el borrador que se escribe a la primera de una obra que jamás se estrenará"- palabras más, palabras menos. La frase viene del escritor que visitaba la cafetería en la película de Amelie. Por lo tanto... cometo los errores al citar a un autor con una frase inexacta y sin el autor.

Isela dijo...

Nadie escarmienta en cabeza ajena

JAJAJA XD