Arte y Mitos

Ya antes había desenmascarado algunos de esos mensajes parcialistas y desinformativos que luego le llegan a uno por correo electrónico. Sonados fueron los casos de los supuestos gatitos bonsai y el de aquel perro que fue exhibido en una galería de arte hasta que murió, ambos destrozados por mí con una sencilla aplicación de sentido común.

Conmocionados, algunos conocidos me advirtieron por medio de chafísimas presentaciones de Power Point acerca de los Genpets, pequeñas criaturas creadas genéticamente en laboratorios y puestas a la venta en empaques de plástico como mascotas. Estas aberraciones, así como sus empaques, sitio de Internet e idea en general, son en realidad la creación de Adam Brandejs. En su página, Brandejs explica el proceso de fabricación de los Genpets y, de especial interés, explica los porqués de su obra, los cuales yo resumiría en el planteamiento que arroja... "¿Por qué, al igual que la mayoría de la gente que ve este trabajo, lo encuentras hasta cierto punto perturbador y, sin embargo, te sientes tan inclinado a comprar uno?".

¿Esto es arte? No lo aseguraría académicamente, pero personalmente sí lo admiro y respeto como tal. La obra del artista en este caso no serían los monitos, sino no los sentimientos y actitudes de quienes los ven. Es esa su materia prima. Es la gente y sus cogniciones lo que el artista manipula para fabricar su obra.