Profetas y Bromistas

A veces fantaseo qe me muero. Me muero y una parte de mi donde radica la conciencia -qizá el alma- llega a algún lugar y se encuentra con otras personas. Todos conversan y comparten las anécdotas de lo qe hicieron en su vida terrenal.

Entre todos los presentes, me fijo en un tipo vistiendo una túnica. Se ve qe viene del medio oriente. En su frente hay marcas como de espinas y en sus muñecas heridas de clavos. Ríe. Ríe muy fuerte mientras cuenta su historia. Nos dice qe él, cuando había estado en la Tierra, había dicho qe era el hijo de Dios. A la mera hora le salió cara la broma, dice, porqe lo mataron con saña. Pero insiste en qe valió la pena. Entre risa y carcajada nos platica como, dos mil años después, casi la tercera parte de los terrícolas siguen cayendo en su broma pesada. Al final, ya con lágrimas en los ojos, dice enmedio de una estrenduosa carcajada "hasta dividieron el calendario en antes y en después de mi". Buena onda el tipo.